Este informe aborda la actividad legislativa del año 2006 desde el punto de vista de su preocupación por los temas de fortalecimiento de la ciudadanía. El estudio que se realizó entre mayo y julio de 2007, catastró el conjunto de proyectos presentados y aprobados por el parlamento chileno entre enero de 2006 y enero de 2007 inclusive. En el estudio se comprenden cinco áreas de impacto para el fortalecimiento de la ciudadanía, éstas son: descentralización, protección social, reforma política, participación ciudadana, transparencia y probidad.
Resultados del estudio:
Alto interés legislativo: De acuerdo a los datos obtenidos durante el periodo de estudio ingresaron 796 proyectos al parlamento, de estos 71 se refieren a materias de impacto del fortalecimiento de la ciudadanía, lo que indica que casi nueve por ciento de todos los proyectos discutidos, tuvieron relación con la materia.
Baja productividad legislativa de fortalecimiento ciudadano: de la gran cantidad de proyectos ingresados durante el periodo de estudio, no se publicó ninguna ley en esta materia, situación que puede tener varias explicaciones, como por ejemplo: por una parte los proyectos ingresados el 2006 están mayoritariamente en tramitación, de modo que no se sabe aún si serán o no aprobados. Es necesario para conocer más sobre la materia el ampliar el alcance del estudio sobre la actividad legislativa, por lo anterior el Barómetro de la Innovación Ciudadana desarrollará una investigación que aborde desde el año 2000 en adelante la situación en el parlamento.
El fortalecimiento ciudadano es una preocupación compartida: la iniciativa parlamentaria en la materia de fortalecimiento ciudadano está repartida en los dos principales bloques políticos, e inclusive estos han propuesto proyectos en conjunto. Por sobre el total de 71 proyectos presentados, la Concertación presentó un 45 por ciento, mientras la Alianza por Chile hizo lo suyo con un casi 30 por ciento. Ocho proyectos del total fueron de iniciativa conjunta.
Las prioridades legislativas son protección social y reforma política: de los 71 proyectos presentados en el área, 47 de ellos corresponden a las materias de protección social y reforma política; lo sigue participación ciudadana, que cuenta con 15 proyectos propuestos durante el periodo. El poder Ejecutivo sigue la tendencia general relevando protección social y reforma política. Menos atención reciben en términos cuantitativos, la descentralización, transparencia y probidad y participación ciudadana.
La participación ciudadana en el debate parlamentario: de los 71 proyectos propuestos que tienen relación con materias de fortalecimiento ciudadano, 70 de estos fueron presentados bajo una moción parlamentaria, y sólo uno fue un mensaje del ejecutivo, específicamente este trataba sobre la Convención sobre la Protección y Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales y su anexo , adoptada en la 33ª Conferencia General de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura, UNESCO.
Consideraciones finales:
Contrariamente a la opinión más o menos extendida respecto de la distancia de los legisladores respecto de temas de interés ciudadano, el parlamento chileno manifiesta durante el período estudiado un conjunto amplio, diverso y transversal de iniciativas que pueden clasificarse válidamente como tendientes al fortalecimiento del ejercicio de la ciudadanía. Ésta se encuentra repartida entre las dos cámaras, con predominio de la iniciativa de diputados, así como también se haya presente en los mensajes del ejecutivo. La Concertación de Partidos por la Democracia ha auspiciado mayor cantidad de proyectos en la materia, sin embargo también existe una cantidad considerable de ellos presentados por la Alianza por Chile y también de presentación conjunta.
A pesar de la significativa cantidad de proyectos, no se advierte en el parlamento ni en las fuerzas políticas chilenas, una agenda coherente referida al fortalecimiento ciudadano. Por una parte el ejecutivo ha separado sus iniciativas de protección social de las referidas a participación ciudadana y transparencia y probidad, encargándolas a diferentes reparticiones y sin vincularlas discursiva ni políticamente. Por otra, en un primer análisis se advierte que aún cuando las iniciativas parlamentarias, salvo escasas excepciones, apuntan a ampliar los espacios y mecanismos de ejercicio de la ciudadanía, ello no se manifiesta en “bloques” transversales, en iniciativas encadenadas entre sí, ni en discurso público explícito, como ha sucedido con otras materias (defensa del medio ambiente, descentralización, incluso salud) en el pasado. Esto puede revelar que aún el tema se encuentra en una primera fase de desarrollo, sin alcanzar la prioridad política de otros.
Corresponderá a la ciudadanía organizada ejercer el monitoreo de la iniciativa legislativa, de tal manera de conocer sus resultados e impactos reales, algo que los ciudadanos y ciudadanas están demandando crecientemente.
Informe completo: descargar desde aquí