El Informe sobre Desarrollo Humano en Chile 2024, publicado por el Programa de las Naciones Unidas (PNUD), explora por qué los cambios necesarios para avanzar hacia un Desarrollo Humano Sostenible no han logrado concretarse, a pesar de las demandas ciudadanas y el respaldo del conocimiento experto.
El informe identifica la dificultad para conducir cambios sociales como un problema clave. Esta conducción no depende sólo de la voluntad política, sino de una red compleja de interacciones entre actores sociales, influenciada por subjetividades, discursos públicos e instituciones. Esta dinámica ha entorpecido las transformaciones que Chile necesita para enfrentar los desafíos futuros.
El análisis del PNUD sugiere que Chile carece de capacidad colectiva para transformar su sistema social y económico. Aquí cobra relevancia el concepto de «puntos de apalancamiento» desarrollado por Donella Meadows. Según Meadows, un punto de apalanca miento es un lugar estratégico dentro de un sistema donde una pequeña intervención puede generar un cambio significativo.
El informe plantea que los actores sociales en Chile no han logrado identificar ni activar estos puntos de apalancamiento. Los esfuerzos se han centrado en modificaciones superficiales, sin tocar el propósito del sistema, que son los elementos que más influyen en su comportamiento. En términos de Meadows, el propósito de un sistema define cómo este opera y cualquier intento de cambio que no lo modifique sólo producirá resultados parciales o temporales.
Una de las características del pensamiento sistémico es su enfoque en las interconexiones dentro de los sistemas. En lugar de centrarse en eventos individuales o cambios aislados, este enfoque re- conoce que los sistemas operan mediante estructuras de retroalimentación, generando comportamientos no lineales. Estos comportamientos son clave para entender por qué las soluciones simples a menudo tienen efectos imprevistos.
La hipótesis del informe es que la incapacidad para concretar los cambios necesarios se debe a que las intervenciones no han afectado el núcleo del sistema. Para lograr transformaciones sostenibles, es esencial una comprensión sistémica que permita identificar y actuar sobre los puntos de apalancamiento adecuados, lo cual implica revisar las instituciones, normas y valores que sostienen el sistema actual.
Otra característica del pensamiento sistémico es la identificación de límites, es decir, hasta qué punto una intervención puede ser efectiva antes de generar efectos contrarios a los esperados. En el caso chileno, entender estos límites es crucial para evitar políticas mal diseñadas que, lejos de generar progreso, obstaculicen el avance social. Sin una intervención estratégica en los puntos clave del sistema, los cambios seguirán entrampados.
Por Mauricio Hernández, investigador del CEDER.
*Publicada el 24 de octubre de 2024 en el Diario Austral de Osorno.